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8 abril, 2024La mayoría de las veces, hacer una mudanza conlleva un sin fin de paso agobiantes y muy estresantes.
Aquí te damos unos consejos para hacer más llevadera una mudanza en la misma ciudad.
Suele ser relativamente sencilla, pero aun así no deja de ser un proceso tedioso para el que debemos estar preparados.
Si por alguna razón tu nuevo hogar es más pequeño, recuerda que puedes contar con un servicio de guardamuebles para almacenar tus objetos personales de gran tamaño en un sitio seguro.
Esto es una excelente opción cuando el espacio en el nuevo hogar es reducido o simplemente los objetos o muebles van a ser donados o vendidos.
¿Qué vas a encontrar en este artículo?
Minimiza tu hogar
Una mudanza es un nuevo comienzo, aunque sea en la misma ciudad. Esto es una oportunidad única para empezar a hacer las cosas mejor y redecorar todo el espacio personal a tu gusto.
Para lograr dar un estilo minimalista a la casa, es necesario tirar o donar las cosas que ya no aportan una utilidad positiva a la vida diaria o a la decoración en general.
Este paso también puede ser aplicado para la ropa que ya esté un poco vieja o dañada.
Recuerda que mientras menor cantidad de cosas hay en la casa, más fácil será el proceso de almacenar y mudar.
Cambia el color de las nuevas paredes
Para un ambiente más fresco se recomienda pintar las paredes de colores pasteles o claros, esto dará una sensación de paz en cada rincón de la casa.
Aunque no lo parezca, la combinación de todos estos factores puede aportar beneficios sensacionales a nivel psicológico.
Gracias a estos colores de paredes, sería más fácil lograr una decoración con contrastes que sean agradables para la vista.
Recuerda intentar no sobrecargar el hogar con elementos que podrían dañar la sinergia del lugar.
Empaca con tiempo anticipado
La parte más difícil y tediosa de una mudanza es empacar todas las cosas.
Por eso se recomienda empezar esta actividad por lo mínimo un mes antes de la fecha señalada.
Gracias a este método tendrás más tiempo para organizar cada espacio.
La mejor opción es comenzar desde objetos personales tales como ropa, zapatos, libros y papeles importantes.
Al terminar los objetos personales, continúa empacando adornos y cuadros importantes, para luego proceder a la cocina y exteriores.
De esta manera, reducirás todas las tareas y el estrés generado por la mudanza.
Deja espacio y dinero para nuevas plantas
Una vez dentro de la nueva casa, prioriza la compra de nuevas plantas para crear un nuevo espacio con sentido de pertenencia.
Las plantas nuevas dan la sensación de un nuevo comienzo y un nuevo respiro. Esto es perfecto para el proceso de adaptación y de crecimiento personal.
Las plantas son excelentes fuentes de buenas energías, también ayudan a limpiar y purificar el aire del hogar.
Es por ello que nunca debe faltar una meseta o un huerto en tu nuevo espacio.
Luego de todo el estrés generado por la mudanza, intenta en lo posible olvidar la agenda de tareas y el trabajo en general.
Date unos días de descanso para disfrutar de los cambios y el nuevo estilo de vida.